domingo, 4 de mayo de 2014

MIRANDO EN MI INTERIOR

MIRANDO EN MI INTERIOR



Una cosa es la realidad y otra la manera en que la interpretamos, en esa manera tenemos que incluirnos nosotros mismos los primeros como protagonistas principales de nuestra obra teatral diaria.
Ser conscientes de que nos está pasando algo en la vida es difícil en occidente, vivimos sobre una cinta de correr donde nos está prohibido parar y pensar. Llevo llorando desde el miércoles por la noche que era el día de mi cumpleaños y sigo insistiendo que no creo en las casualidades pero siempre hay que dejar una ventana abierta para aprender cosas nuevas.

Me interesan mucho las cambios de humor y la falta de voluntad, ¿es posible manipular a una persona en un momento concreto? O nosotros solitos nos arrastramos en el fango, pero con mi mente analítica me preguntó ¿por qué?













Sigo llorando ¿ nos afecta tanto los comentarios?

Puede ser que la forma en que mediante comentarios para desahogarse, desacreditar o interferir en las relaciones personales generamos la semilla de la duda en mentes ajenas. Entonces, solo queda esperar que la gente pregunte directamente tu vivencia de la situación, que ignore los comentarios y que se cierna a la estricta relación personal que se mantienen en otros ámbitos. 
Creamos opiniones personales no contrastadas y  que desde el egocentrismo alimentamos generando juicios y prejuicios, sembrando en cotilleos de escalera la duda sin análisis personal tomando partido en la vida de personas que se encuentran a nuestro alrededor la mayoría gente maravillosa que busca un beneficio común, pero hay que tener cuidado con la gente que se aprovecha y quiere llevar siempre, siempre razón y hará lo que sea necesario para tener la razón.¿ hasta dónde son capaces de llegar?




Sigo mirando en mi interior

Veo una parte buena de mí donde me pongo siempre del otro lado, todo el que me conoce sabe que mi casa está abierta cuando lo necesite, otra cuestión es cómo esté la casa soy un desastre recogiendo, pero tengo una habilidad excelente para vivir en el desorden.
La confianza en la gente es lo que más me gusta y dentro del mundo en el que habito me disgusta comprobar que todo sigue igual , quienes desde tiempos inmemoriales tienen privilegios no sólo los perpetúan sino que los extienden con sus chismes enfrentándonos a nuestra costa.
La esperanza es un sentimiento reconfortante donde permanecen latentes nuestros sueños e ilusiones.

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